
Valentina Urteaga estuvo en La Vuelta del Perro, y comentó su experiencia en el show de regreso del músico después de años polémicos.
El Mario Alberto Kempes recibió a 35 mil personas que fueron testigos de una noche histórica: el regreso de Pity Álvarez a los escenarios. El sábado 20 de diciembre, la fiesta arrancó en los alrededores del estadio con cánticos populares, banderas, asados y muchas expectativas.
Fiel a su estilo, el cantante realizó una entrada polémica, sosteniendo de una correa a una mujer como si se tratara de “una perrita”, como la llamó. En medio del show, comentó “si Dios nos hizo a su imágen y semejanza, quiere decir que todos somos dioses. ¿Quién me va a venir a juzgar a mi? solo el Universo me puede juzgar”.
Todas las generaciones quisieron ser parte de una noche que quedó en los libros del rock nacional. La incertidumbre de no saber lo que iba a pasar, fue opacada por la sorprendente performance de Pity, quien se mostró emocionado durante varios momentos del recital.
El músico realizó un recorrido musical por Viejas Locas e Intoxicados, con una lista de 33 temas. La emoción colmó al público cuando sonaron clásicos como “Fuiste lo Mejor”, “Árbol de la vida” y “No tengo ganas”.
El regreso del “rey sin corona” después de 9 años de inactividad, fue posible con un permiso judicial. Cabe destacar que, en 2018, Pity atravesó su etapa más oscura y destructiva, donde las drogas fueron protagonistas. En ese entonces, lo esperaba un recital en Tucumán, pero a sorpresa de todos, no se presentó, causando bronca, impotencia y destrozos por parte de los fanáticos. Meses más tarde, se entregó luego de asesinar a Cristian Díaz, bajo la justificación de “era él o yo”.
Pity sigue bajo la mirada de la justicia. Su impactante presentación le dió un visto bueno a la situación, pero en apenas unos días debe presentarse en Tribunales para continuar con sus asuntos legales.
POR VALENTINA URTEAGA



